martes, 2 de septiembre de 2008

Es complicado


Bueno, bueno, hoy haré una reflexión muy profunda sobre lo difícil que es educar a un niño pequeño. La verdad es que yo no tengo uno niño pequeño pero tengo una gatita que es como si un niño pequeño de aproximadamente 3 meses fuera capaz de dar saltos de medio metro y subirse por las pareces con lo cual es mucho peor.

Mi gatita se llama Lilly (yo no lo elegí venía así de casa) aunque mi primera opción era llamarla Katchoo en honor a Terry More, pero tras la amenaza de mis amigas y las de Elvira de llamarla Keptchup si osabamos a ponerle ese nombre se quedó con lilly.

Lilly me quiere mucho (a mi más que a Elvira ¡que se aguante!) se me sube encima y ronronea y me chupa la cara y las manos (que no se si es por cariño o porque como cocino yo me huelen las manos a comida) pero es una terrorista, le entra el ataque de locura de vez en cuando y no para de botar, se come los bolsos y los vaqueros si la dejas y como no calcule te suelta un zarpazo mientras juega, así que ahí ando yo estoicamente intentando que no se suba en la mesa cuando comemos y pronunciando mi frase favorita de estos dias

!!!Lilly NO!!!!! y es que lilly es como un niño pequeño, o mejor un superniño pequeño
sólo espero que ningún día de los que me queden por ver existan niños que nazcan con la habilidad y la agilidad de un gato porque ese día la humanidad estará condenada.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Deja a la nigna (estoy en Berlin...)que se desarrolle y sea feliz, malcriala!!!

Besin!